TALLER HUMORÍSTICO "Hotel Monasterio
de los disparates"
FOROS DEL
HOTEL / CONVENTO DE SAN ERASMO
CONGRESO DEL
CONVENTO DE SAN ERASMO
El Padre
Cañibano, consciente de las "necesidades" de los huéspedes del hotel,
ha sido inspirado para enseñar ejercicios ...espirituales.
Ofrece el
salón dorado del Hotel a los monjes y cursillistas del Monasterio de San Erasmo
para que puedan salvar sus almas y conseguir el éxtasis místico que los llevará
hacia la completa elevación...
No sabe si
vendrán o no, pero él ya ha preparado sus "diatribas apocalípticas. "
ULTIMA
OPORTUNIDAD. ¡NO SE LA PIERDAN!
2008-01-19 19:11:06
- Uyyyy este chiquito qué redondito poarece un emparedado y
con el hambre que tengo!!!
jajaja en cualquier momento le doy un mordisco...
Oye , muchacho... qué te parece si buscamos a esa muchacha que anda gritando y
nos vamos a buscar al Iñaki ese encargado de la comida... mucho rezo, mucho
dedo, pero hay un hambre infernal... o será que el padre pretende que le
chupemos el dedo??
NINA-309
2008-01-19 17:49:19
Un intruso en el paraíso
Hola,
pase adelante. Lo que sucede es que andábamos concentradas en las
manifestaciones del Padre Cañibano...
2008-01-19 16:38:44
2008-01-19 14:43:03
Oiga, perdón, en este hotel quien atiende?, estoy tocando el timbre y como que
no.el.recepcionista esta drogui ante la tele .pero no es de 4* este hotel? ay,
ay..¿donde me habré metió? me dijeron que habia un congreso del patron de mi
pueblo SAN ERASMO y aqui se habla de troncos sexso y orgasmossssssss que fuerte
y yo con el avito puesto !!!
chely-1807
2008-01-19 12:50:54
EL PADRE CAÑIBANO REZA POR NINA
El padre Cañibano escucha el monólogo de Nina y se tiende en el suelo, boca abajo, cuan largo o corto es, a rezar por esta pecadora empedernida. Mientras lo está haciendo recuerda, sin poder evitarlo, que con sus movimientos sandungueros Nina enseñó la punta de la enagua y el padre Cañibano, que no es de piedra ( ni ningún otro hombre lo es, seamos claros, porque si fueran de piedra las mujeres se quejarían de que no las dejaban respirar) se ha dejado llevar por pensamientos de lujuria.
Sale corriendo hacia su celda, donde busca un cilicio bajo el lecho y comienza a darse de ciliciazos en la espalda hasta sangrar como un cerdo. Allí queda, desmayado en el suelo y sin ayuda, porque Silente, el monje trapense, se ha ido tras de Nina para indicarle el bufé que Iñaki Lizorno ha preparado para esta ocasión: verduritas para los monjes y manjares para los invitados. Que se chinchen los monjes. Ha dicho Iñaki que no siente mucha simpatía por ellos.
Silente no ha caído en el pecado de hablar, sus gestos han sido señalar con el dedo enhiesto a una puerta y a otra y a otra y a Nina le entra la risa, dado la simbología erótica de ese gesto.
Silente ha caído en el pensamiento de lujuria, pero en lugar de irse a dar de latigazos a su celda ha decidido pecar más para luego hacer más penitencia.
Padre Cañibano-1305
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