“Doctor Trevelan, ¿para que soy bueno?... ¿Mortimer me esta buscando en
relación a un que?... ¿alguien molesta a Rodrigo?… bueno, que se busque a un
buen sicario y con eso es mas que suficiente, supongo… ¿no es alguien vivo? Ya
veo… estaré ahí lo mas pronto posible, simplemente necesito arreglar unos
asuntos aquí en la clínica.”
Alexander hecha una mirada al enorme cubo de hielo y piensa: “Tardará mucho
tiempo en descongelarse, lo suficiente para atender el problema de Rodrigo.
Creo que voy a necesitar un poco de ayuda astral para este difícil caso, ¿Dónde
andará Milarepa?”
Alexander sale del cuarto rumbo al bar de Mortimer y se topa con Filidor.
“Mi estimado colega, el cubo esta en el cuarto numero 214, por favor pase a
revisarlo y deje a alguna enfermera o persona encargada, que me llame cuando el
hielo este casi deshecho, yo tengo algunos asuntos que atender en el bar de
Mortimer”
Alexander le entrega su tarjeta al doctor Filidor y le da un caluroso apretón
de manos para despedirse.
Alexander Trevelan-602
2006-10-19 08:56:50
Después de correr por los pasillos de la clínica, y llevarse por delante a
pacientes, enfermeras, trabajadores, por fin, en aquella corta pero loca
carrera, Franlend se detiene con un golpe seco (del choque) en el marco de la
puerta de la habitación que sirve de almacén de cocina.
Debido a ese frenazo su cuerpo vuelve a salir disparado hacia adelante yendo a
aterrizar encima de las cajas de huevos almacenas en el fondo de la estancia
haciendo un buen estropicio debajo de él.
Pringado de yemas de huevo lentamente levanta la cabeza y dirige la mirada
hacia la puerta de la habitación y ve que poco a poco rostros asombrados
empiezan a asomarse por la misma para ver su maltrecho cuerpo. Nota que cada uno
de esos rostros que lo están analizando lleva en la nariz unas pinzas de colgar
la ropa.
.- Este estropicio creo que lo incluye la póliza que acabo de abrirle a Norma.
–Se dijo para si Franlend - ¡Esto si que es empezar con mal pie! ¡Y yo como
protagonista!
Cuando d e pronto un ligero Psssssssssssssssssssssssss, proveniente de la
entrepierna posterior, marca el punto y final de esta correría.
Franlend-906
2006-10-19 10:26:23
Norma no pierde la calma, es una mujer que rara vez pierde la calma.
-Franlend… Cómo que.. con mal pie?- Habla para sí.
Franlend se encuentra con toda la cabeza chorreante de huevos, la cara amarilla
por las yemas; y las yemas y las claras descendiendo ya por hombros, pecho y
brazos… El público recoloca y aprieta la pinza cada cual en su nariz, algunos
se ríen del aterrizaje del Hombre de Seguros.
Sólo Norma ha observado, ha captado el suceso... el fenómeno..., y alienta a
Franlend a seguir. Un poco más al fondo de la cocina han vuelto a colocar al
paciente de Treveland, que sigue echo un bloque de hielo.
-Prosiga, Franlend…, prosiga… - le alienta la doctora- el orificio anal un poco
más hacia el fondo, por favor…!
El no comprende, hasta que escucha…
Norma ha cogido su móvil, marca, pi…. pi… pi….. pi…. pi… :
-“Hola… “¿Doctor Treveland?” Venga de inmediato. ¡El hielo de su paciente se
derrite al instante donde Franlend ventosea!
Tiene que analizar los componentes de esos gases. Pienso si tendrán poderes
sobrehumanos. Provéase de unas bolsitas resistentes y venga hacia la cocina del
Hotel sin tardanza.
Franlend, oyendo esto, dispara en todas direcciones con inusitada generosidad,
pero sin perder el punto de mira: el bloque de hielo, que se derrite por
momentos. ¡Tal vez consiga salvar al hombre helado! ¡Si se da prisa tal vez lo
rescate con vida!
Entre los mirones, alguien, tapándose la boca, comenta que a ese hombre se le
había encontrado dentro de una cámara frigorífica de las cocinas, pero todavía
no se le ve la cara, y se desconoce su identidad.
Norma. Dra en Psicología-709
2006-10-19 11:54:35
Aturdido del viaje y del vuelo final, Franlend no sabe en donde se encuentra.
Tan solo ve la cara de Norma que le está animando (o consolando) Ella comienza
a acercarse lentamente a su oído y empieza a susurrarle algo, ininteligible, en
él. Entonces la mirada del accidentado se empieza a desviar de la puerta, y de
sus observadores, y se dirige al canalillo que lleva Norma debajo de su bata
blanca y que lentamente se le acerca.
Ese canalillo, producto del apretamiento de las dos poderosas y generosas….
razones de Norma , se le acerca tanto a su amarilla, y chorreante, nariz que
tan solo distan entre ellos un solo centímetro.
El aroma limpio, fresco y femenino de ese cuerpo de mujer no lo puede ocultar
detrás del olor de sus ventosidades ni de la tortilla francesa que se está a
punto de cuajar debido al calor que empieza a subir.
.- Franlend , creo que vamos a tener que solicitar una oficina en algún lugar
del hotel para atender a tantas demandas que vamos a tener por su… alocada
carrera. – Le susurra al oído Norma – Pero también creo que vamos a salir del
paso más rápido de lo que creemos pues… es usted un hombre muy “ardiente” y
“explosivo” y estas flatulencias creo que médicamente, e industrialmente, son
una mina.
Franlend en la posición en que se encuentra y sin mover el más mínimo músculo
de la cara entorna sus ojos hacia abajo y cree distinguir al fondo de la
habitación un tubo de hielo, con dos piernas, a medio descongelar.
Franlend-906
2006-10-19 12:46:36
Se hecha el pañuelo a la cara por los hedores y observa como el témpano se va
descongelando rápidamente.
“Norma, llame por favor a las enfermeras. Que traigan suero, cobijas y una camilla
en la cual depositar al paciente… no, al que traigo arrastrando no, ¡al
congelado! Y le suplico sea rápida, no hay tiempo que perder.
En relación a los flatulentos gases del señor Franlend; no se preocupe, buscare
a Milarepa y veremos que podemos concluir sobre este extraño fenómeno.
Por lo pronto apure a las enfermeras, necesitamos trasladar a este paciente a
emergencias con la mayor brevedad posible… ¡al que traigo arrastrando no! Al
congelado, Norma, ¡al congelado!”
Alexander Trevelan-602
Rodrigo Contece-500
2006-10-19 12:58:04
Rodrigo no entiende lo que sucede a su rededor. Todo mundo
corre y hay unos olores un tanto desagradables. Se queda de pie mirando a su
alrededor cuando una nueva onda gélida le recorre la espina dorsal.
-Para un pronto, te servirá un tonto.
Esto dice un hombre rústico, que se ha adelantado de entre el grupo de
observadores. Se supone que dirige sus palabras al Dr Treveland, aunque no se
entere, que yace inconsciente; se apresura a socorrerlo.
Echenme una mano.
El mismo Rodrigo se remanga la camisa y lo coge por los pies.
-Vamos a colocarlo provisionalmente en la cámara frigorífica. Le ha salido un
chichón de cien pares de pelotas en la cabeza, y el frío baja los chichones y
los abultamientos por golpes en general. Eso sí, no se nos puede olvidar
sacarlo en unos 20 minutos.- Ordena y explica el rústico bajito.
Entre él y Rodrigo meten a Treveland en el frigorífico. Se frota las manos, con
gran satisfacción y se dirige hacia el pasillo.
- Y contra el flato, bicarbonato, amigo.- Le dice a Franlend, mirándolo con sus
ojos redondos y tapándose la nariz con el pulgar y el índice.
Panza-1303
2006-10-20 20:45:44
“el paciente” dice y corre a la puerta para encontrarla cerrada, Rodrigo sigue
con su pelea y ha olvidado al doctor.
Alexander entonces sonríe.
“Estas aquí, ¿no es así?” dice y una figura se materializa frente a el.
“Sabes que no tienes permiso de vagar en este plano, muchacho, eso solo
significa una cosa. Te dieron una segunda oportunidad, no se que negocios
tengas con Rodrigo pero debiste haberme contactado a mi.”
La figura simplemente le mira
“ahora ayúdame a salir de este congelador y vamos a ver que es lo que esta
pasando con el témpano de hielo, creo que eso te interesa mas a ti que a mi,
¿no?.”
La puerta de congelador se abre.
2006-10-21 06:06:09
Un enorme camión de mudanzas estaciona ante urgencias y los mozos proceden a
descargar todo el materia donado por el profesor Cabezaprivilegiada. Tenemos
quirófanos ultramodernos, un completísimo equipo de laboratorio (el doctor
Philidor se hace cargo para examen de heces) y muchas más cosas que son
colocadas en su sitio por instrucciones de dos personajes que acaban de
aparecer y que nadie sabe quiénes son.
OTILIO.- Dice que es jefe de personal o encargado de relaciones humanas.
ROMERALES.- Dice que es el nuevo gerente, encargado de la administracción
práctica de la clínica (la doctora Norma seguirá siendo directora, encargada de
asuntos técnicos).
Vamos a poner un poco de orden, dicen los nuevos personajes y el doctor
Philidor se troncha, porque tienen toda la pinta de organizar aún más desorden
.