TEATRO MÁGICO I

 

TEATRO MÁGICO

Simplemente recomendarles la lectura del Lobo estepario de Hermann Hesse y concretamente la página 169 de mi edición (en la suya no andará muy lejos), donde dice: " Esta noche, a partir de las cuatro, Teatro Mágico -solo para locos-. La entrada cuesta la razón. No para cualquiera. Armanda está en el infierno.

EL FORO DEL "TEATRO MAGICO



(EXORDIO)



Este foro no es para cualquiera. No para cualquiera. Sólo para LOCOS.

En cualquier parte del mundo, así como por unas calles cerca de este HOTEL podrán encontrar -si es que lo merecen- la puerta del TEATRO MAGICO. No a cualquiera se le abre la puerta: No por no quieran abrírsela, sino por sólo pueden hallar la puerta los que pueden "ver" con los ojos de su Ser; los que buscan traspasar el muro de sus yoes insignificantes, y encontrar un "Yo" más legítimo, más verdadero.

Aquí podrán exponer sus experiencias vividas y compartirlas con otros iguales que han tenido la oportunidad de ingresar al TEATRO MAGICO.

2006-01-30 21:09:42
THE CHEST GAME

Luego de ver a Jacinto desaparecer en la bruma de la madrugada, de maldecirlo por cobarde, de jurarle amor eterno, de querer matarlo por causarme este dolor otra vez, y de recordar sus besos y su cuerpo en las caballerizas, tome algo de fuerza en el bar de mortimer con un trago y sali a caminar, a donde me llevaran mis pasos...-dile que me fui para un concierto, no quiero que nadie me moleste ahora- espero , el señor Radamante no se haya molestado por la mentira, pero no estaba para charlas, luego de lo acontecido con Jacinto.
Sin darme cuenta ya habia caminado un largo trayecto, y las calles eran completamente desconocidas, mire hacia atras, y a lo lejos pude divisar la torre del Pent house del Hotel y respire tranquila.Hacia frio, mis manos temblaban a pesar de los guantes y el abrigo, y el frio en mi interior era aun peor. Cuando alce la mirada me encontre en un extraño callejon, con una puerta pequeña y escaleras hacia un sotano, como se dislumbraba con la debil luz de un bombillo que colgaba del techo. Una rafaga de viento me envolvio y me obligo a buscar escape en la puerta, llegue y me resguarde un poco, pero me intrigaba la extraña puerta, abierta a tan altas horas de la madrugada. Al fondo de las escalas volvi a ver ese maldito letrero y el temor congelo mis sentidos. Hacia tiempo ya que lo mismo me habia sucedido, y no podia explicarme como era posible que pasara de nuevo. Movida por una mezcla de miedo y curiosidad baje las escalas y al final encontre otra puerta, esta vez cubierta por un par de cortinas viejas, ajadas...adentro, un hombre, inexplicablemente familiar para mi, me llamo por mi nombre. Entre y lo primero que encontre fue mi imagen reflejada en un inmenso espejo.
-bienvenida al Juego...
-juego???
y sin decir mas palabras de un solo golpe quebro el vidrio que estallo en mil pedazos, de los cuales , doce cayeron a mis pies.
-ya podemos empezar...-dijo y de repente, al detallar los trozos de vidrio, me di cuenta que asemejaban las figurillas de un juego de ajedrez, y para mi mayor asombro, cada una tenia mi cara; mire el piso, estaba en medio de un gran tablero de ajedrez y de repente reconoci la cara de ese hombre...era mi padre, aquel que nos habia abandonado desde que yo tenia memoria, tenia la certeza de que era el...
-que jugada vas a hacer ahora Marilyn...quien vas a ser, el peon?- y una de las figuras se incorporo, mejor dicho, adquirio mi tamaño y ocupo su posicion -o el Alfil, tal vez, Porque no te juegas tu Caballo??- Todas las imagenes se movian como guiadas por una mano invisible a mis ojos y aterrorizada me encontre en medio de todas las Marilyns que habia sido hasta ahora, y otras caras que no habia visto aun, pero sabia, eran mias. Trate de correr
-vas a escapar de nuevo? ahora tampoco vas a hacer tu movida?
cuando piensas hacerla? ESCOJE LA FICHA, PUEDES USAR LA QUE QUIERAS...O PUEDES CONTINUAR MIRANDO EL TABLERO Y DEJANDO QUE LA VIDA TE PASE POR ENCIMA SIN MOVER, SIN ARRIESGAR TU POSICION SEGURA...-Callese!!! grite, pero sus palabras retumbaban contra las paredes. Lo mire desesperada, y ante mis atonitos ojos, vi lo que hubiera preferido no ver jamas...mis ojos, mis labios, mi rostro en el rostro de ese hombre, todos tenian mi rostro, y danzaban en un baile desquiciado a mi alrededor, riendo, llorando, amando, matando...

No supe como logre coordinar mis piernas y salir corriendo escaleras arriba hasta llegar a la calle, mas oscura ahora, mas tenebrosa, mas fria. volvi la cabeza, y ya no encontre la puerta, ni el letrero, ni las escalas...era mas de lo que podia soportar. Segui corriendo como loca, las calles eran eternas, las caras burlonas me seguian y las palabras retumbaban en mis oidos como alaridos de dolor. Llegue a la puerta del Hotel, me dirigi hacia el elevador con un solo pensamiento en mi cabeza. Como automata entre a la habitacion, me desnude y tome el frasco de pastillas, saque unas cuantas...muchas...pocas...las suficientes para no pensar, para dormir y olvidar, y me meti entre las sabanas...vi en el piso un sobre con mi nombre, y embotada me levante para tomarlo, creo que regrese a la cama, el resto no lo recuerdo...-
Charly la escuchaba atentamente, pero no parecia sorprendido en lo absoluto.
-My darling, fue en ese momento que me llamaste a mi cuarto...ven, voy a prepararte un buen baño y una taza de cafe, asi como te gusta....-

Marilin Monroy-102

2006-01-30 21:25:38
Sin poder resistir la tentación de lo vivido la noche anterior, decidí salir de nuevo, por las callejas próximas al Hotel. Y de nuevo, por arte de magia, diviso el el letrero "TEATRO MAGICO" Sólo para LOCOS.
Entré. Y aquí les narro los momentos que viví:
Despues de ser acogido por el anfitrión, y tras beber unos tragos, esto fué lo que me acontenció:
EN EL TEATRO MAGICO

MARILIN
¿Duermes, Radamante?
RADAMANTE
¿Quién se acerca furtivamente?
MARILIN
Soy yo: ¡escúchame!
En profundo sueño yace Don Sata;
le preparé adormecedora bebida:
¡aprovecha la noche para salvarte!
RADAMANTE
¡A salvo estoy solo con verte!
MARILIN
Déjame enseñarte un arma:
¡oh, si la ganaras!
El más noble de los héroes
pudiera yo llamarte,
pues sólo al más fuerte
fue destinada.
¡Oh, advierte bien
lo que voy a decirte!
Los hombres de ASTERION
se sentaban aquí en la sala,
invitados por Don Sata a la boda:
desposaba él una mujer que,
sin ser preguntada,
los ladrones le regalaron
para esposa.
Triste me sentaba yo
mientras ellos bebían;
entró entonces un extranjero:
un anciano
con grisácea vestimenta;
llevaba calado el sombrero,
que le tapaba uno de los ojos,
pero los rayos del otro
causaron temor a todos;
solamente a mí me miró
con agrado
dándome pena y alegría a la vez.
Parecía ser el Sabio MILAREPA.
A mí me miró con dulzura,
y a ellos con furor mientras
blandía una espada en la mano;
después la hundió
en el tronco del fresno,
allí la clavó
hasta la empuñadura:
la espada sería de quien
la arrancara del tronco.
Por mucho que audazmente
se esforzaran,
ninguno de los presentes
logró arrancar el arma;
huéspedes vinieron
y huéspedes se marcharon,
los más fuertes
tiraron del acero,
ni una pulgada
cedió en el tronco:
allí sigue clavada la espada.
Entonces supe quién era aquel
que saludó
a la transida de dolor;
yo sé también a quién destina
la espada clavada en el tronco.
¡Oh, si encontrara hoy aquí al amigo,
si viniera desde lejos para consolar
a la más desdichada mujer;
cuanto padecí con acerbo dolor,
cuanto jamás sufrí
con vergüenza y oprobio,
¡dulcísima venganza,
expiáralo todo!
Recuperaría lo que perdí,
lo que tanto he llorado,
si encontrara al amigo sagrado,
si estrecharan al héroe
mis brazos!
RADAMANTE
(abrazando a MARILIN)
¡Mujer divina, ya tienes el amigo
a quien arma y mujer
están destinadas!
¡Ardiente en el pecho
me abrasa el juramento
que te hace mi noble compañera!
¡Cuanto anhelaba lo vi yo en ti,
en ti he encontrado
cuanto me faltaba!
Si tú has padecido vergüenza
yo he sufrido ofensas,
si yo fui proscrito
y tu fuiste deshonrada,
¡alégrate, la venganza
ríe ahora a los dichosos!
¡Ahora reiré
con sagrada alegría,
teniéndote abrazada
sintiéndote palpitante
sobre mi corazón!
(Una puerta se abre de par en par;
fuera magnífica noche de
primavera; la luna llena ilumina el
interior y deja caer su suave luz
sobre la pareja)
MARILIN
¡Ah! ¿Quién ha salido?
¿Quién ha entrado?
RADAMANTE
Nadie ha salido,
pero uno ha entrado,
¡mira, la primavera ríe
en la sala!
Las tormentas invernales
han cedido
ante el delicioso mayo,
con delicada luz
brilla la primavera;
entre dulces brisas,
leve y graciosa,
se mece tejiendo prodigios.
Por bosques y prados
sopla tu aliento,
muy abiertos ríen sus ojos:
dulcemente suena el canto
de felices pajarillos,
exhala divinos aromas;
de su cálida sangre
florecen deliciosas flores,
¡gérmenes y retoños
brotan de su vigor!
Con el ornato
de sus delicadas armas
somete al mundo;
invierno y tormentas
han tenido que ceder
ante su fuerte baluarte:
también han cedido
a sus gallardos golpes
la dura puerta
que, terca y rígida,
nos separa de ella!
Surcando el aire ha llegado
junto a su hermana;
el amor ha llamado a la primavera;
se ocultaba en nuestro pecho,
ahora ríe dichoso a plena luz.
A la hermana nupcial
ha liberado el hermano;
destruido yace cuanto
les mantuvo separados;
¡jubilosa se saluda
la joven pareja,
unidos están amor y primavera!
MARILIN
Tú eres la primavera
por la que yo suspiraba
en el helado tiempo del invierno.
Mi corazón te saludó
con sagrado temor
cuando tu mirada floreció para mí
por primera vez.
Desde siempre
todo lo veía yo extraño,
lo próximo era enemigo;
extraño me era todo
lo que se me acercaba.
Pero a ti te reconocí en seguida
apenas te vi supe que eras mío;
lo que ocultaba en el pecho,
lo que soy,
claro como el día emergió de mí:
como sonora vibración
llegó a mis oídos
cuando en helado,
desierto país extranjero
vi por vez primera al amigo.
RADAMANTE
¡Oh, dulcísima delicia!
¡Mujer divina!
MARILIN
Oh, deja que me incline ante ti,
que vea con claridad
ese augusto brillo
que emana de tus ojos
y del rostro
y tan dulcemente
me subyuga los sentidos.
RADAMANTE
A la luna de primavera
resplandeces luminosa,
sublime su halo rodea
tu cabello ondulante:
fácilmente veo lo que me cautiva,
pues mi mirada se deleita
en cuanto contempla.
MARILIN
¡Qué despejada está tu frente,
el ramillete de tus venas
se entrelaza en las sienes!
¡Tengo miedo de la felicidad
que me embelesa!
Un prodigio hace recordar
que hoy te he visto
por primera vez,
pero que mis ojos ya te habían visto!
RADAMANTE
Un sueño de amor
también me hace recordar:
¡que yo ya te había visto llevado
por mi ardiente deseo!
MARILIN
En el arroyo contemplé
mi propia imagen...
y ahora la percibo de nuevo:
¡como antes emergiera
a la superficie del agua,
así me ofreces tú ahora mi imagen!
RADAMANTE
Tú eres la imagen
que yo ocultaba dentro de mí.
MARILIN
¡Oh, calla!
Déjame escuchar tu voz:
me parece haberla oído
siendo niña.
¡Mas, no! La oí recientemente,
mientras el bosque
me devolvía el eco de la mía.
RADAMANTE
¡Oh, dulcísimo sonido,
el que escucho!
MARILIN
Me ilumina la llama de tus ojos:
así me miró
el anciano al saludarme;
cuando dio consuelo
a mi tristeza.
Por la mirada he visto
que eres hijo suyo
¡quisiera darte
su mismo nombre!
¿De verdad te llamas "Vagabundo"?
RADAMANTE
No me llamo así
desde que tú me amas:
¡ahora poseo
las más sublimes delicias!
MARILIN
¿Y no puedes llamarte
Mensajero de la Paz?
RADAMANTE
Llámame como tú quieras
que me llame:
¡de ti tomaré mi nombre!
MARILIN
¿Pero no llamaste "Vagabundo" a tu padre?
RADAMANTE
¡Un lobo era él
para los cobardes zorros!
Pero aquel a quien tan orgulloso
le brillaba el ojo
como a ti, nobilísima,
te brillan los tuyos,
se llamaba.
MARILIN
Si era un vagabundo tu padre
y tú eres un vagabundo también,
él clavó
para ti su espada
en el tronco,
déjame llamarte
como quiera:
¡te llamaré RADAMANTE!
RADAMANTE
(se levanta de golpe y corre al
tronco del fresno)
¡RADAMANTE me llamo y RADAMANTE soy!
¡Testimónielo esta espada
que sin miedo cojo!
"Vagabundo" - mi padre- me prometió
que la encontraría
cuando la necesitara:
¡ahora la cojo!
Supremo sufrimiento
del amor sagrado,
extrema aflicción
del fuerte deseo
abrasa mi pecho
empujándome a luchar
hasta la muerte.
¡En la hora de la desgracia! ¡En la hora de la desgracia!
Así te llamo, espada.
¡En la hora de la desgracia! ¡En la hora de la desgracia!
¡Precioso acero!
¡Muestra de tu filo
los cortantes dientes!
¡Sal de tu vaina!
(arranqué del tronco la espada con
un poderoso tirón y la muestré a
MARILIN, embargada de asombro y entusiasmo)
¡Estás viendo a RADAMANTE, - Mujer,
al "Vagabundo"!
Como dote nupcial
traigo esta espada.
Así pretende él
a la más divina de las mujeres,
de la casa del enemigo
así te rapta.
Lejos de aquí,
sígueme ahora,
vayamos donde ríe la primavera:
¡allí te protegerá En la hora de la desgracia,
la espada,
aunque RADAMANTE
muera de amor por ti!
MARILIN
Si es RADAMANTE
el que veo,
yo soy MARILIN,
que te desea:
¡a tu propia hermana
acabas de conquistar
con tu espada!
RADAMANTE
Novia y hermana eres
para el hermano:
¡florece así, pues,
la sangre de los ASTERIONS!


Radamante-303