sábado, 26 de diciembre de 2020

LA GUARDERÍA DEL HOTEL DE LOS DISPARATES XVII

 


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2006-04-27 13:53:56
¡Ay! ¡Lo que habrá que oir!

“..Desde mi mejoría, noto que algunos señores de mi edad me miran con otros ojos...Y esta vez, como me ha mejorado la vista, ¡Yo los veo a ellos!...” Con estas palabras en la cabeza sigue el camino Norma hacia la Guardería que, ya, más bien debería llamarse CENTRO DE ACOGIDA.

¡Ay! Que se nos casa la Matildita… Anda que como se haga con Brunelli, por ejemplo, deja a la Filo con dos palmos de narices… Con estos pensamientos para sí misma va la joven mujer. A ver que se encuentra en el Centro, eso es Centro de Acogida. Hay niños muy mayores para llamarse Guardería y muchas personas altruístas colaborando.

2006-04-27 14:08:11

ENVIDIADOS Y ENVIDIOSOS


—Ozú, doctora! Qué cambio en los niños, quilla!
—¿Y ese acento, Bente. Si eres inglesa,¿ no?
—Azí é, pero desde que veo ezzte cambio no zé qué me paza que hablo en andalú a veze y en argentino otras, sabés doctora?
—¿Tú estás bien, mi niña?
— Sí, nunca estuve mejor.
— Bueno, cuéntame pues.
—No tenés más que mirar: qué espejos de niños nos están trayendo, que noz loz han cambiao, que ze lo digo yo…

La doctora Norma mira a los muchachos y esto es lo que ve:
La tímida y acomplejada Carmelita Calzada está preciosa con un lazo verde en el pelo y ya levanta la vista con cierta frecuencia y se le han iluminado los ojos. Luis Angel parece mucho más niño que antes, sonríe y es como si la enfermedad se le estuviese yendo de su cuerpecillo. Sara Helena se ve más conversadora que antes, con muchas ganas de compartir y de hacer reir a las demás niñas. El pequeño Chimpandolfo dice “Ika” llamando a Vicentika y le dan accesos de risa cuando la nombra, le ha cogido un cariño asombroso. Francisquita sigue cogiendo lo que no es suyo pero está más centradita con esas invenciones y fantasías suyas, con razón contó Matilde que se ponian las dos a largar por la boca y ya no sabía si lo había dicho ella o la niña. Y Mono _ Loco, al que han comenzado a llamar José, su nombre de pila; está risueño y sereno, y empiezan a ir tras él los demás, como si fuera el hermano mayor.

Yayo y Empollonix no están, se encuentran con Bill y con el Profesor respectivamente, pues se tuvieron que demorar un poco en llevárselos. La mayor de todos está con MIA en el Centro de Estética, buscando por el Chat un marido para su madre.

Pero en el fondo hay tres tristes, que envidian a los que ya han conocido a sus padres. Son Maricarmen Todogritos, Secuoya Oya y Cortes Volcánica; y también el grandullón de Alfonsito Gancho llora. No habrán podido acudir todavía pero ellos se sienten despechados, creen que no los quieren y no levantan cabeza.
Y más escondido, en un rincón apenas visible está el niño poeta. Norma le pide que le deje ver lo que escribe. El niño se muestra reticente, pero al fin se lo da:


Así es la vida. Unos tienen suerte.
A otros no nos quieren.
Unos viven y otros mueren.
Y yo soy de los que mueren.
¿Para qué habremos nacido
nosotros, los que no somos queridos
por nadie, ni abrazados, ni besados, ni añorados, ni esperados,
si somos una planta, un mueble, un trasto inútil
y nunca llegaremos
a ser otra cosa?


Norma se queda con el papel. Y ya no se siente tan contenta…

2006-04-27 14:24:08
¿Y JUANITO...?

—¿Y qué se sabe de Juanito Lorópez, ese niño tan rematadamente malo?
—Se fue con Trevelan.—Doctora, perdone que me inmiscuya en más de lo que me corresponde, pero ¿usted cree que hicieron bien con encomendárselo a Alexander?
—Sí, mi niña. Del mismo modo que todos tenemos libertad para obrar, este niño la va a tener desde bien chiquito.
—¿Libertad dice? ¿Y qué opina de esa frase filosófica que es: "Yo soy yo y mis circunstancias?
—Cierta, totalmente cierta. Uno no es como es sino bajo las circunstancias que lo envuelven.
—Ya...

2006-04-28 00:08:28
Un renovado Alexander llega con Juanito

“Disculpe usted la tardanza, doctora Norma, lo que sucede es que Juanito y yo tuvimos un fin de semana esplendido y no quisimos que acabara tan pronto. Comenzó con un grato paseo en el parque, el jovencito tiene una cabecita llena de curiosidades a las que yo les di contestación, luego fuimos a comer un helado y a cazar insectos ¡si viera que bien la pasamos persiguiendo escarabajos y esquivando los piquetes de hormiga! El domingo fuimos a ver una película de mis favoritas, “Lo que el viento se llevo” tuve que sancionarlo un poco por que estaba muy aburrido, después de eso fuimos a cenar en Alpedrete donde entablamos una singular plática de la que le hablare después.

Últimamente le he estado inculcando en la buena lectura y en la entomología, al parecer es la ciencia por la que se inclina el jovenzuelo, bueno, se lo regreso tal y como usted lo encontró sin nada de mas y sin que le falte nada, buenas tardes muchacho, pórtate bien y recuerda lo que te dije.”

Alexander le da unas palmaditas a Juanito en el hombro y lo deja en la guardería.

2006-04-28 12:35:05
EL DOCTOR SUN DA UNA CONFERENCIA A PADRES ADOPTANTES Y NIÑOS ADOPTADOS "PRIMA PARTE"

Por iniciativa de la doctora Norma, al cumplirse los cien días de gobierno...digo desde la inauguración de la guardería (¿o son menos?), invita al doctor Sun a dar una conferencia a padres e hijos sobre la educación, de unos y otros, sobre la sociedad y sobre la vida en general. En mi humilde opinión tal vez el doctor Sun no sea el conferenciante ideal -dado su cinismo- y sí lo hubiera sido Milarepa, pero Dios escribe con renglones torcidos.

La conferencia sufrió un serio retraso debido a que la doctora Norma tuvo que sacar al doctor Sun del subconsciente colectivo, jalándolo de los hombros con fuerza. O dicho de otra manera, que lo despertó y llevó a rastras desde el butacón del vestíbulo donde había caído, rendido de su borrachera, de su depresión endógena pertinaz que le condujo a un intento de suicidio en el orgasmatrón y de la desesperación congénita que atenza sus genes, a pesar de su originen meridional.

Lo cierto es que la doctora se lo llevó, escoltado por la señorita Bente y Carlitos, y ya en la guardería lo subió como pudo a la tarima en la que se había instalado una mesa alargada, de conferencia de prensa, orlada de guirnaldas y con una pancarta que decía "Viva la doctora Norma y todos sus ancestros". Pancarta confeccionada por los niños (con asesoramiento, se supone, dado que seguramente desconocen la palabreja).

Se sienta el doctor Sun en el centro de la mesa, a su derecha la doctora Norma, a su izquierda la señorita Bente y un poco más allá Carlitos. La doctora hace una presentación encomiástica del doctor Sun, alaba su generosidad subconsciente para con la especie humana y especialmente con los niños. Carlitos tiene que taparse la boca con una mano y luego mordérsela, para que nadie note su hilaridad.

Finalmente el doctor Sun es subido a la tarima con atril y allí mira al público que a su vez le observa con expectación. Se aclara la garganta, pide agua a Alvarito, que actua como relaciones públicas y hombre de confianza de la doctora Norma y finalmente comienza:

"Queridos papás adoptantes, queridísimos niños adoptados. Señoras, señores, señoritas, señoritos, público en general, curiosos en particular y quienes quieran oír y escuchar.

La vida requiere un severo aprendizaje, de otra forma serán devorados por ella. Y esto va no solo para los frágiles infantes, sino para los aún más frágiles adultos, muy pagados de sí mismos, pero más tontos que el que asó la manteca.

Permítanme tocar el primer punto y luego veremos si llegamos al segundo:

Los niños no son tontos. Esto es un axioma incontrovertible. Y sino prueben a prometer un caramelo a un niño por un favor y luego se lo pueden negar. Ya verán que la patada que reciben en la espinilla les hará ver las estrellas en un viaje nocturno en globo.

Si no son tontos no los traten como a tales. Díganles la verdad, por muy dolorosa que les resulte a ustedes, no a ellos, y no intenten manipularlos con la disculpa de que son pequeños.

El segundo punto es el cariño,pero ahora permítanme que haga una pausa para un pitillo, con su permiso o sin el.

 

2006-04-28 12:54:27
PRIMO INFORME DE BRUNELLI A LA DOCTORA NORMA SOBRE SARA-HELENA, SU HIJA ADOPTIVA


Brunelli llega un tanto cariacontecido al despacho de la doctora Norma. Esta le pregunta si ha ocurrido algo grave (conociendo a Brunelli todo el mundo hubiera pensado lo mismo).

-Verá usted, grave, grave, lo que se dice grave, no, de ninguna manera, pero es que a un servidor le pueden los niños. Como soy soltero y no estoy acostumbrado, veo su carita de angelito y no puedo negarles nada.

-¿Qué es lo que no le negó a Sara-Elena? Abrevie que me muero del susto.

-Pues verá. Salimos del hotel y quise saber dónde quería que fuéramos.

-Me gustaría que fuéramos a ver a mi hermanita, princesita Sara, pero sin Helena, mi hermana mayor, que es gimnasta rítmica y que hace una exhibición en el complejo olímpico de esta ciudad.

-¡Jo! niña, Te expresas como un político.

-Sí, porque yo también quiero ser gimnasta rítmica y campeona del mundo (que mi hermanita aún no lo consiguió) y nada me lo podrá impedir, ni las envidias, ni las venganzas por los cambios de clubs, ni la corrupción en los jurados y las federaciones, nada. ¿Me oye, tito Brunelli, nada?

-Vale pequeña. No sé si me han dado en adopción a una niña o a una barby, candidata a primera ministra.

El caso es que la seguí como pude y la niña no paraba de hablar y yo tenía ya un dolor de cabeza de no te menees. Y tuve que tragarme una exhibición de seis horas, impertérrito. Y la niña pidió helados al bombonero y yo no pude negarme y le compré la caja de helados y bombones, de crema y chocolate.

-¿Y dejó que se los comiera todos? -La doctora Norma se santigua.

-¿Qué otra cosa podía hacer? Su cara de angelita me pudo. Eso sí su hermanita es una fuera de serie. Una exhibición fantástica, una malla roja preciosa, música de tango y dos mazas en las manos. ¡Una presencia en el tapiz de las que quitan el hipo!

"El caso es que la niña siempre tenía un bombón helado en la boca y cuando quise darme cuenta no quedaba ninguno".

-¿Y usted no comería uno o dos por lo menos?

-Bueno, sí, uno sí. Ya no me dio tiempo a más. Terminamos en el hospital. Un servidor con la mano de la niña en mi manaza y contándo cuentos infantiles.

-¿Para adultos? Que lo conozco Brunelli.

-Bueno, sí, pero un poco descafeinados. El caso es que la hicieron un lavado de estómago y al día siguiente la llevaron a la feria. Allí tuve que tirar bolas a un montón de peluches, porque a la niña le gustan los peluches más que los helados. Finalmente la subí en un tiovivo, mientras yo sujetaba los peluches. Como tenía mal cuerpo vomitó y la tuve que traer. Ahora está en una camita de la guardería, dormida como un angelito. Estaba agotada.

-¡No me extraña! Es usted el zopenco más grande que conozco, Brunelli . FIN PRIMO INFORME

2006-05-01 16:13:54
EL HOTEL ESTÁ MÁS MOVILIZADO QUE NUNCA

¡Por todos los santos!... Dice Norma y de desploma en la cama, de espaldas.
No sé a qué atender.
Se quita un zapato de tacón fino y se queda pensando. Se toma diez minutos para poner en orden las ideas.

Estaba con el problema de CACHO, grave. Cuando sonó el móvil, dos veces.

La primera era del Dr Sun. Iba a proceder a la charla para padres adoptivos.
Tenía diez minutos para arreglarse para la ocasión. Cuando llegó al Salón de Actos del Hotel, las lágrimas le llenaron los ojos: una pancarta de dimensiones enormes que decía VIVA LA Dra NORMA y TODOS SUS ANCESTROS. El abuelo Jesualdo, la abuela Victoria, mamá, papá, hasta el tío Hilario pasaron como en un corto de película por su cabeza. Eso lo habían preparado los chicos y la palabra “ancestros” sin duda era de Alvaro Empollonix que se conoce de pe a pa todo el Diccionario de la Real Academia de la Lengua.

Y remontémonos unos minutos atrás….

2006-05-01 16:23:49

ENCIERRO PROTESTA EN EL CENTRO DE ACOGIDA

EN el entreacto de la charla del Dr Sun, en el Descanso, mientras Brunelli le cuenta a Norma su extrema blandura con la educación de la niña, por quererla tanto, Suena de nuevo el móvil de la doctora, es Carlitos Temprano.

—Querida Doctora. Tenemos un problema. Un grupito de niños se ha encerrado a cal y canto en la Guardería y no quieren salir. Le paso a Bente.
—Doctora. La cabecilla ha sido Cortes Volcánica, me temo. Se han encerrado y dicen que no saldrán hasta que aparezcan sus padres adoptivos.
.........

.........
2006-05-02 12:59:00
UNA GRAN CANTIDAD DE PERSONAS SE VA AGOLPANDO EN LA PUERTA DE LA GUARDERIA, DONDE SE HAN ENCERRADO UNOS CUANTOS NIÑOS.

—Cortes, bonita, escúchame....

El silencio por respuesta....

—Sólo dime, quienes estáis ahí, ...
—Yo. Y mis amigos.
—Sí. ¿Y qué amiguitos?
—Gustavo Adolfo, Secuoya, Maricarmen, Alfonsito y Miguelín Pedante.
—Abrid y Brunelli os hará trucos de magia y os contará un montón de chistes.
—No vamos a abrir.
—Y Bill os regalará juegos para la computadora.
—Que no. No hasta que vengan nuestros papás. Sabemos que no nos quieren.

Carlitos, ve al despacho y tráeme esos documentos donde están los padres que adjudicamos a estos chicos, por favor.


 2006-05-02 13:10:41 

ERRE QUE ERRE


A Filomena Masturbano, Cortes Volcánica.
A Antonnieta Valentina, Gustavo Adolfo.
Al profeta Milarepa, Secuoya Oya.
A pasadoperfecto, Maricarmen Todogritos.
A Cyrano, Alfonsito Gancho.
A Gasita, Miguelín Pedante.

Carlitos Temprano y Bente Winter, los jóvenes cuidadores, llegan con este documento.

La doctora piensa que es preciso que alguno de estos adultos acuda rápidamente y se va a proceder de la búsqueda de los mismos por todo el Hotel. No se sabe si en estos momentos se encuentran presentes.

Mientras tanto, algunos, al otro lado de la puerta, tratan de convencer a los chicos, sobre todo a Cortes, que es la más tozuda, tratan de convencerlos de que abran.

 Milarepa llega para recoger a su hija adoptiva Secuoya Oya y se encuentra con el follón



Milarepa, en cuerpo físico, y con su túnica azafranada recién lavada, su calva más reluciente que nunca, aparece por el hotel, oliendo a incienso y dispuesto a hacerse cargo de su hija adoptiva.

Se entera del encierro y revolución que han organizado algunos tiernos infantes y decide ofrecerse a la doctora Norma y a la señorita Bente, para lo que sea menestar. Éstas le dicen que es necesario hacer algo o la guardería puede convertirse en un mayo del 68.

Milarepa antes firma los papeles de la adopción y se compromete a un informe semanal. En cuanto Secuoya Oya lo ve se le acerca embelesada.

-¿Eres mi nuevo novio?

-¿Pero tenías otros novios? Pareces muy joven. Mira lo mejor es que dejemos las cosas claras. Yo soy tu papá y aunque me veas con cuerpo de veintipocos años mi alma reencarnada tiene varios milenios. Asi que procura verme como un anciano y nos irá mejor a los dos.

-¿Y no puede hacer como que eres mi novio?

-Deja de pensar en noviazgos. Ahora lo importante es tu educación. Y para empezar vamos a aprender la primera lección: cómo se convence a un niño de que la no violencia, al estilo Ghandi, es mejor que tirar ladrillos a la cabeza.

Milarepa llama a los niños que están armando un follón de mil demonios:

-Vamos, hijos mios, sentaros en el suelo, respirar, cantad conmigo unos mantras y luego nos vamos todos al jardín a charlar sobre vuestros problemas.

-¿Y no comprarás caramelos y palomitas?


Sara-Elena se le acerca:

-¿De verda eres tú mi papá?

-Tu papá es Brunelli, encanto.

-¿Y por qué entonces nos llamas hijos?

-Porque todos somos hijos del Padre y partes del todo.

Y Milarepa sale de la mano de Secuoya Oya y le siguen todos los niños dispuestos a olvidar sus reivindicaciones por unos minutos .

 

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